Desde hace algún tiempo parece que están de moda los lugares públicos donde los niños no son bienvenidos. Cines, hoteles, restaurantes y hasta vagones de trenes...en los últimos tiempos existe una proliferación de negocios que prohíben, sí sí, prohíben la entrada de los niños hasta cierta edad. Y no cabe duda de que que si existen es porque hay una demanda.
No voy a entrar en si nos deben o no gustar los niños, pese a que todos lo fuimos una vez. Pero sí que me produce cierto escalofrío pensar que la "niñofobia" pueda estar tan generalizada como para que negocios prohíban directamente la entrada a un ser humano, porque señores, los niños son seres humanos, a un espacio público. Que el derecho de admisión existe, por supuesto, pero creo que este derecho no se creó para excluir a una persona solo por el hecho de ser menor de edad (salvo que la actividad del local esté prohibida para el menor. Ej: sexshow, apuestas, etc).
Yo no soy ni abogada ni jurista, pero creo que si un bar prohibiese la entrada a una persona por su religión, sexo, raza podríamos denunciarle y al propietario le caería una multa importante.
Entonces...¿Por qué existen restaurantes, hoteles, cines en los que los niños no pueden entrar y la sociedad se queda de brazos cruzados?¿No sería mejor apelar al sentido común de los padres?
Soy madre de un bebé de 10 meses y no se me ocurre, ni por lo más remoto, llevarle a un cine o a un teatro. Tampoco le llevaría a un balneario o a un restaurante a las 23h. Y si lo hago, porque no me quede más remedio, pues si veo que molesto, me voy. No necesito que nadie me lo prohíba o me inviten a irme porque el resto del personal se sienta ofendido por el llanto de mi hijo.
Y vosotros ¿qué opináis? ¿Os han negado la entrada a algún sitio por ir con vuestros peques?